Desde el pasado mes de julio diversos jueces han intentado dar cumplimiento al mandato de la Corte Constitucional de Colombia que, en una sentencia de 2011, ratificó que las parejas del mismo sexo constituyen familia, al tiempo que daba un plazo de dos años al Congreso para que legislara y regulara este tipo de uniones. Transcurrido ese plazo sin que el proyecto de ley saliera adelante, los jueces han decidido aplicar la recomendación del alto Tribunal. Como explica Julio González, el juez que ha casado recientemente a dos mujeres, “un juez puede hacer interpretación de las normas, cuando hay algunos vacíos hay analogías y hay técnicas que pueden usarse. En este caso, la analogía no se hace solamente tomando en cuenta normas del Código Civil, sino que ya tenemos una sentencia de la Corte Constitucional que está rigiendo plenamente, donde se explica a los funcionarios judiciales que en el caso de que no existiera una regulación legal de las uniones de parejas del mismo sexo se debían aplicar las normas del Código Civil. Esto sucede porque la Corte no puede asumir la función de crear nuevas leyes, y ya que el Congreso no lo hizo, los jueces podemos interpretar que según la Constitución y el Código Civil se pueden practicar matrimonios".
Pero los sectores homófobos de la sociedad colombiana no están dispuestos a aceptar sin más esta situación y la Procuraduría General de la Nación ya ha conseguido que un juez anule un matrimonio celebrado en septiembre, en lo que parece una batalla que no finalizará hasta que la Corte Constitucional se pronuncie de nuevo. Mientras tanto, las organizaciones LGTB, como Colombia Diversa, siguen comprometidas con el asesoramiento a las parejas del mismo sexo que quieran casarse, a las que ya están casadas y a aquellas cuyos procesos de matrimonio estén siendo obstaculizados por las acciones desarrolladas por la Procuraduría, a cuyo frente se encuentra Alejandro Ordóñez, hombre profundamente religioso que no ha ocultado nunca su abierta oposición al matrimonio entre personas del mismo sexo.
Pero los sectores homófobos de la sociedad colombiana no están dispuestos a aceptar sin más esta situación y la Procuraduría General de la Nación ya ha conseguido que un juez anule un matrimonio celebrado en septiembre, en lo que parece una batalla que no finalizará hasta que la Corte Constitucional se pronuncie de nuevo. Mientras tanto, las organizaciones LGTB, como Colombia Diversa, siguen comprometidas con el asesoramiento a las parejas del mismo sexo que quieran casarse, a las que ya están casadas y a aquellas cuyos procesos de matrimonio estén siendo obstaculizados por las acciones desarrolladas por la Procuraduría, a cuyo frente se encuentra Alejandro Ordóñez, hombre profundamente religioso que no ha ocultado nunca su abierta oposición al matrimonio entre personas del mismo sexo.
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