EL DIFÍCIL ACCESO DE LA MUJER A LA JUSTICIA

Según ONU Mujeres, organismo dirigido por Michelle Bachelet, el 80% de las mujeres del mundo accede de forma muy limitada o nula al sistema de justicia formal en sus países. Éste ha sido el eje central del encuentro celebrado por el citado organismo y los gobiernos de Finlandia y Sudáfrica en Nueva York a finales del pasado septiembre, en el marco de un nuevo período de sesiones de la Asamblea General de la ONU. Son más de 100 los países en el mundo que incluyen en sus constituciones garantías de igualdad de género, que tipifican la violencia doméstica como delito, que poseen leyes de igualdad salarial y contra el acoso sexual en el trabajo. Sin embargo, la aplicación efectiva de tales leyes se aleja mucho del espíritu que inspiró las normas, y en la práctica, las mujeres sufren profundas dificultades para disfrutar del estado de derecho en el que teóricamente viven. Esta es la razón por la que ONU Mujeres pidió la derogación de todas las leyes discriminatorias, una mayor participación femenina en el sector de la justicia y “reformas institucionales innovadoras sensibles a las necesidades específicas del colectivo". También recomendó políticas sociales dirigidas a eliminar aquellos obstáculos informales que impiden el acceso de la mujer a la justicia (desigualdad económica, estigma social...), y agilizar los planes de reparación a las víctimas y de reconciliación nacional después de las guerras. Desde ONU Mujeres se esfuerzan en promover sistemas de justicia sensibles a las necesidades de las mujeres, ofreciendo diversos enfoques para desarrollar sus derechos. Entre ellos destacan los siguientes: apoyar a las organizaciones jurídicas de mujeres, aplicar reformas legales sensibles al tema de género, utilización de cuotas para aumentar la cantidad de parlamentarias, capacitar a los jueces y supervisar las decisiones, invertir en el acceso de las mujeres a la justicia... Sin educación, conocimiento de sus derechos y poder de decisión, las mujeres suelen ser incapaces de reivindicar lo que les corresponde, conseguir apoyo legal o acudir a los tribunales.