APPS DE CONTENIDO SEXUAL

Sigue aumentando el número de personas que a diario utiliza aplicaciones en sus móviles, tabletas, ordenadores, televisores... hasta un 25 % de los españoles, según los datos referidos a septiembre de 2012 y proporcionados por The App Date, la plataforma de las apps en España. Entre las aplicaciones descargadas se pueden encontrar muchas con contenidos de tipo sexual que, sin entrar de lleno en el sexo explícito, se mueven en un terreno entre erótico y divertido, y todo parece indicar que éste es un sector en auge, aunque no se disponga de cifras concretas. No solo el kamasutra cuenta con múltiples versiones en app, también se pueden encontrar aplicaciones centradas en el mundo del beso, como Beso Me Baby, Hello Kisses o Kiss me, que llegan a puntuar al usuario según la habilidad desempeñada, algo que igualmente se valora en otras como Passion o Sexometer, aunque esta vez referido a algo más que al acto de besar. Aplicaciones como Grindr y Blendr permiten contactar en la zona donde te encuentres con otras personas, y están dirigidas a un público homosexual y heterosexual, respectivamente. A finales de 2009 se creó MiKandi, la primera tienda de apps para adultos que ya ha rebasado el millón de miembros registrados, y cuyas aplicaciones se han instalado en cerca de 4 millones de dispositivos. “El hecho de que hayamos crecido a este tamaño de forma orgánica, sin ningún tipo de dinero para publicidad, es especialmente inspirador para nosotros. Esto demuestra lo que sucede cuando usted se centra en ofrecer un servicio y tratar a los adultos como adultos”, explicaba recientemente en un comunicado Jesse Adams, director ejecutivo de esta empresa de estética minimalista creada en Seattle, que aspira a convertirse en el tercer mercado de apps dentro de Android. 

Parece claro que existe un mercado en auge especializado en aplicaciones de “contenido para adultos”. En nuestro país, doce millones de usuarios activos al día auguran un modelo en alza para el negocio de las apps, en el que, por supuesto, hay cabida para las de contenido sexual.